SINOPSIS: Después de ser declarada loca y llevada a un manicomio por defenderse de su malvado padrastro, una bella chica deberá luchar contra sus propios demonios internos representados en increíbles mundos paralelos para conseguir su libertad.
RESEÑA: Llega a nuestras carteleras la más reciente película del director Zack Snyder (300, Watchmen), una fantasía visual que nace desde la mismísima mente de este reconocido director y que entremezcla, sueños, deseos y realidad en una sola obra muchas veces inconexa.
Desde un comienzo Sucker Punch (algo así como golpe súbito) es un festín visual de hermosos colores, una banda sonora impecable y espectacular, mundos extraños y mucha acción, sin embargo no existe nada que los una de alguna manera coherente, no solo falta esta amalgama que le de sentido a lo que vemos, sino que choca una y otra vez con la pared de actuaciones solo correctas.
Y mis palabras puedes sonar pretenciosas al estimado lector, y talvez pueda pensar que soy una de esas comentaristas que buscan cine arte donde en realidad no puede haberlo. Nada más alejado de la realidad. En mi humilde opinión Sucker Punch se convierte no solo en una obra carente de algún sentido debido a la casi falta de conexión entre los hechos y de un guión pobre en explicaciones necesarias, sino que debido a una absoluta sobreestimación de sus posibilidades por parte de sus creadores. Donde el público solo necesitaba un hilo conductor coherente, Snyder nos entrega todo un pseudo mensaje de dudosa profundidad que solo logra confundir más al estimado espectador. Esta es una historia completamente femenina pero vista desde el prisma de un escritor masculino se convierte en una copia con poco peso de heroinas como Beatrix Kiddo, una historia de superación femenina que se desvanece en la mente masculina rebajándola a una semi odisea caricaturizada que se pierde en una parafernalia visual entretenida, pero que no deja mucho más que una extraña sensación de vacío.
Técnicamente la cinta se presenta impecable, cada una de las escenas está bellamente grabada, tratada digitalmente como le gusta a nuestro buen Zack, las escenas de acción son simplemente alucinantes y el soundtrack que tal como la cinta que acompaña es una increíble mezcla de factura impresionante pero sin un hilo conductor, soprende al espectador y le llena los ojos y el cerebro de un entretenimiento alucinógeno pero fugaz, cuando el efecto pasa, nos quedamos con gusto a poco.
Es que existen muchas y excelentes cintas que tratan de alguna manera u otra el tema del paso de una dimensión a otra y todas han tratado de explicar con mayor o menor éxito el por qué y el cómo. Sin ir más lejos hace menos de un año tenemos a la excelente Inception, El Imaginario Mundo del Doctor Parnassus y varias más, todas sucedidas en más de un plano de realidad. Mundo Surreal no gasta tiempo ni esfuerzo en contestar las preguntas, ni en darle algo de sustancia a estos mundos paralelos, existen y el espectador debe asumirlo, no tienen razón de ser, ni nada que los una a la realidad, ni una manera de acceder a ello. Los pasos que plantea de un mundo a otro son confusos, lo que los une a la realidad es inexistente y lo que hay que hacer para acceder a ellos es irrisorio… estas fallas de guión existen y si no se asumen será difícil que puedas disfrutar más de este filme.
Pero más allá del guión en si hay una falta de identificación del espectador que puede resultar incluso más grave que su incoherencia y esto es lo que hace que sus altas pretenciones de entregar un mensaje de superación se convierta en un fracaso.
No obtante, si se deja de lado estos prejuicios por lo menos por el tiempo que dura el metraje y el espectador se dedicas a ver y vivir esta experiencia que definitivamente no deja indiferente, se divertirá y podrá gozar de la infinidad de buenísimas escenas y de la adrenalina que sin duda la película entrega a raudales. Talvez todos los cuestionamientos vengan después de terminada la cinta, como me pasó a mí o en el mejor de los casos podrá vivir su vida sin sentir que Sucker Punch pudo haber sido un filme de aquellos para venerar y que lo tenía todo para triunfar pero que no supo ir más allá de sus propias pretenciones y no pudo vencer sus propias barreras.
En resumen, Sucker Punch es una fiesta visual encandilante que podría haberse transformado en un perfecto video juego o un excelente videoclip, pero que como película es visualmente embriagante en su forma pero pretenciosa, vacía y sin sentido en su fondo.Y talvez me haya excedido en la severidad de mi juicio esta vez, pero sé en mi interior que esta cinta tenía el potencial y los elementos para convertirse en una obra de culto. Sin embargo, como siempre digo, ustedes son los que tienen la última palabra.
Interesante.
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