SINOPSIS: Un famosísimo artista de cine mudo queda relegado a un segundo plano con la llegada del cine sonoro y la irrupción de una nueva actriz, con quien vive un romance platónico, que llena con su ángel todas las carteleras del mundo. Su vida parece acabada y deberá ver una forma de sobrevivir y no morir en el intento.
RESEÑA: Ganadora del Óscar a Mejor Película en la última entrega de premios está en nuestras carteleras, una cinta melancólica ambientada en los años 20 y grabada a la vieja usanza.
Cuando me senté en las butacas del cine a ver esta cinta dirigida por Michel Hazanavicius me preguntaba una y otra vez con que me iba a enfrentar. ¿El público de hoy, la generación del 3D, sería capaz de aceptar una película completamente en blanco y negro y más que nada sin ningún diálogo? Y lo más importante ¿qué sentiría yo? Ver películas mudas como parte de clases de cine es una cosa ¿pero es posible llevar eso a la pantalla en una película actual? El Artista consigue eso y más. Una película que tanto en lo técnico como en lo argumental no presenta fallas, que está exquisitamente construida y con un cast perfectamente elegido desde los actores principales con el ganador del Óscar Jean Dujardin,Bérénice Bejo, John Goodman y James Cromwell como de su elenco de reparto. No será la más popular de las películas que se presentaron en los Óscares pero no podemos quitarle que era justa merecedora a su premio como Mejor Película.
Su atractiva mezcla de melancolía, ingenuidad y delicadeza conquistan y son capaces de remontar a épocas pasadas y de conquistar al espectador, rindiendo un homenaje hermoso al Hollywood de ayer, ese lleno de esperanzas y juventud.
La pareja protagónica, incluido el perrito que acompaña al protagonista en todo momento, conquistan la pantalla con gestualidad y una indiscutible presencia que llena la pantalla. En ese sentido, el trabajo de Jean Dujardin es maravilloso, justo ganador del Óscar al mejor actor, su utilización de la gestualidad y los códigos propios del cine mudo son de gran calidad y soprenden. Muy atractiva también es la francoargentina Bérénice Bejo, espléndida y hermosa en pantalla, con un desempeño más que correcto y llena de ángel.
Pero más allá del análisis en si mismo de la cinta, El Artista hace un fuerte llamado de atención al Hollywood de hoy. En la era del 3D y producciones palomiteras creadas solo para atraer masas al cine, que los grandes premios cinematográficos del mundo no se cansen de premiar a una producción de bajo costo, francesa, muda y en blanco y negro, es una manera de decirle a la Meca del cine que a pesar de todos los avances técnicos del cine para nosotros, para el mundo aún un buen guión, una buena idea, buenas actuaciones y amor por lo que se hace siguen siendo la base de un buen cine.
Si el espectador de hoy le da la oportunidad, no se verán decepcionados y podrán ver en pantalla un tributo que todos aquellos que amamos el cine no nos podemos perder. Pero como siempre, son ustedes, mis estimados freaks, los que tienen la última palabra.
Muy buena
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Erika Moreno